¿Dónde ha quedado la obligación para los 1,5 millones de hogares españoles con calefacción central de instalar repartidores de costes antes de 2017? La Directiva 93/76/CEE (SAVE) obligaba a que todos los hogares con sistemas de calefacción central instalaran dispositivos de medición individuales. Sin embargo, la normativa que debía regular esta obligación en España no ha hecho más que causar confusión entre los consumidores. El ahorro medio de energía puede llegar al 15%.
Por un lado, el Real Decreto 8/2014 de aprobación de medidas urgentes para el crecimiento, la competitividad y la eficiencia, determinaba un régimen de sanciones para el incumplimiento de esta obligación. Sin embargo, más tarde, en febrero de 2016, el Consejo de Ministros en funciones aprobaba el Real Decreto 56/2016 de Eficiencia Energética, por el que se transpone la Directiva Europea de Eficiencia Energética (2012/27/UE), en el que se obviaban estas cuestiones.
No hay obligación
Todo ellos a confundido a los consumidores y comunidades de vecinos. En realidad, y de momento, no existe en España ninguna obligación. Así lo ha confirmado, por ejemplo, la Confederación Nacional de Asociaciones de Empresas de Fontanería, Gas, Calefacción, Climatización, Protección contra Incendios, Electricidad y Afines, CONAIF, en un comunicado en el que advierte que la medida ha quedado en suspenso hasta que la formación de un nuevo Gobierno actúe en la materia.
En cualquier caso, el sector aconseja instalar sistemas de individualización de consumos y válvulas termostáticas en los hogares españoles con calefacción central aunque no sea obligatorio instalarlos por ser una medida que favorece el ahorro de energía y representa una clara oportunidad de negocio.
Coste medio de inversión por vivienda de 350 euros
En este sentido, la Asociación de Repartidores de Costes de Calefacción, AERCCA , asegura, citando “estudios realizados en Italia”, que la instalación de estos dispositivos modifican la actitud del usuario y permiten, solo por este hecho, un ahorro medio de un 15€ de energía. Un aspecto a tener en cuenta dado que la calefacción (60%) y el agua caliente (24%) constituyen el 84% del consumo de energía de un edificio.
El presidente de AERCCA, Ignacio Abati, asegura que si además de los repartidores se instalan también válvulas en toda la población afectada, un millón y medio de personas, para regular la temperatura de radiadores se podría ahorrar en calefacción 1.100 millones de euros en cinco años.
Concretamente, asegura que los plazos de amortización en ningún caso superan los 18 meses. El ahorro aproximado para un hogar se estima entre los 220 y 280 euros al año de ahorro con un coste medio de inversión por vivienda de 350 euros. Explica también, que, a día de hoy, que no es obligatorio, se necesita las tres quintas partes de la junta de la comunidad de vecinos.
Además, un estudio realizado por la Universidad de Alcalá para ista, empresa especializada en medición individual de consumos de calefacción, indica que su instalación implicaría una reducción de 224 euros de ahorro por familia española media y la disminución de un total de 2,4 millones de toneladas de CO2 al año.
Alertas de consumo en tiempo real
Ante la posibilidad de que la obligatoriedad entre en vigor en un plazo próximo y ante las ventajas económicas y medioambientales que supone el que el consumidor gestione la energía que consume en función de sus necesidades, las innovaciones tecnológicas en este campo se suceden.
Una de las últimas en presentarse es Onenodde que permite controlar, monitorizar y gestionar la energía de los edificios a través de una plataforma software desde un entrono web “on cloud” en la que el consumidor conoce en tiempo real toda la información relativas a su gasto en calefacción, ACS y agua fría. También permite recibir fallos del contador o alertas ante un consumo excesivo.
