El pasado 31 de diciembre la planta de generación eléctrica mediante valorización energética de la biomasa forestal de Corduente (Guadalajara) cerró sus puertas y despidió a todos sus trabajadores por la falta de rentabilidad de la explotación. Las causas anunciadas son el nuevo impuesto a la generación eléctrica, y la interrupción del convenio de suministro de la empresa pública Gestión Ambiental de Castilla-La Mancha (GEACAM) que debía suministrar el 40% del combustible.
Con el cierre de la planta se pierden los trece puestos de trabajo directos y los 250 indirectos de GEACAM que se encargaban de la poda y limpieza de los bosques.
La planta era uno de los compromisos encuadrados dentro del Plan Integral del Ducado tras el grave incendio de 2005 del Alto Tajo, y la firma de un documento entre La Junta y los ayuntamientos de la zona con vigencia hasta 2015.
El encargado de la gestión logística de la planta, la empresa Factorverde, S.A, a pesar de la «parada técnica» de la planta, continúa su actividad logística y mantiene su centro en la comarca de Corduente. La empresa especializada en innovación y promoción de bioenergía, con quince años de experiencia en el aprovechamiento de la biomasa sólida, entiende que hay mucho por hacer en favor del desarrollo del sector y pondrá su know how al servicio de la biomasa térmica. Suministrará a clientes locales el combustible necesario para el mantenimiento de las instalaciones de calefacción y agua caliente sanitaria con biomasa.
De esta forma, Factorverde, a la espera de que la planta eléctrica de Iberdrola pueda recuperar su actividad, ha decidido seguir apostando por los beneficios que este tipo de fuente de energía comporta, contribuyendo a la generación de riqueza en entornos rurales, la creación de puestos de trabajo y la prevención de incendios.
“España es rica en biomasa, nuestro potencial es muy alto y si aprovechásemos este recurso ganaríamos todos, reduciríamos nuestra factura energética, las emisiones de CO2 y crearíamos empleo y riqueza en el medio rural“– afirma Roberto De Antonio, socio fundador de FACTORVERDE. “La biomasa tiene futuro porque es buena para la sociedad” – añade.
De esta forma la compañía reafirma su convicción y lanza un mensaje de optimismo, confiando en la resolución de condiciones favorables para el desarrollo de un sector que puede contribuir al crecimiento económico y al desarrollo sostenible del país.