La multinacional Vestas ha anunciado el cierre de las instalaciones de Ólvega (Soria), donde tiene una fábrica de sistemas de control de aerogeneradores, y la reducción de la producción de palas en Daimiel (Ciudad Real). Estas actuaciones vienen determinadas como resultado de la crisis actual y de las malas previsiones para los próximos años. Según Vestas, los motivos principales del cierre son que la industria eólica y la situación de muchos mercados en todo el mundo se han visto afectados por la crítica situación financiera mundial, la incertidumbre regulatoria y el bajo crecimiento esperado, especialmente en los países de la OCDE para los próximos años.
El recorte de la plantilla tiene la finalidad de adaptar su organización a la demanda futura y a los niveles de actividad esperados en los próximos años. Con estas medidas se pretenden reducir los costes fijos para asegurar la rentabilidad a largo plazo de Vestas.
Precedentes
El 12 de Enero 2012 Vestas informó al mercado a través de su notificación a Bolsa No. 3/2012 de un plan de reorganización mundial que afectaba a 2,335 empleados en todo el mundo. Posteriormente, el 22 de Agosto 2012 publicó en el Informe Financiero del Segundo Trimestre que se intensificaban los ajustes planeados inicialmente, lo que implicará una reducción adicional de 1.400 empleados en todo el mundo. Esta decisión obedece a la necesidad global de Vestas de ajustar la organización y la capacidad productiva al nivel de producción esperado en 2013 de 5 GW frente a los 6,3 GW del 2012, lo que supone un 21% de reducción.
Según Vestas la reducción de los costes fijos permitirá conseguir márgenes positivos de una forma estable. Con los planes anunciados en Agosto, la empresa incrementará la reducción de los costes fijos de 150 millones previstos inicialmente a 250 millones de euros para finales de este año, lo que supone un 34% de incremento. Un dato significativo si lo comparamos con la reducción de trabajadores, lo que hace prever que Vestas piensa que en 2014 y siguientes, la situación empeorará en España.
La situación de incertidumbre regulatoria y la actual situación económico-financiera en España de los últimos años ha afectado en gran medida al desarrollo de la eólica en el territorio español. Tal y como apunta la AEE, en lo que va de año en todo el mercado nacional casi no han entrado nuevos pedidos de aerogeneradores. Esto se suma a que en 2011 los pedidos fueron menos de 100 MW y los de 2010, 220 MW, frente a una media superior a 1.500 MW en años anteriores. Los fabricantes españoles han advertido ya hace meses que la carga de trabajo de la industria apenas llega a la mitad de su capacidad productiva.
Miguel Picardo, Director General, Vestas Iberia, afirma: “… a largo plazo no es sostenible que el 95% de la producción local se destine a la exportación. Por ello, no tenemos opción. Vestas necesita adaptar la organización y los costes a la realidad del mercado actual en España y a la del resto del mundo.” «…. y garantiza que los compromisos con los clientes del mercado español no se verán afectados por los ajustes del tejido productivo español.»
Negociación trabajadores y estado de otras plantas
Vestas ha informado hoy a la representación legal de los trabajadores de las plantas de Ólvega y Daimiel, y a los trabajadores de las mismas sobre los procesos que comienzan hoy. A partir de este momento, se inicia el proceso de negociación con la representación legal de los trabajadores, la cual Vestas espera transcurra de la mejor forma posible y basada en el diálogo.
La fábrica de Ólvega se dedica desde 2003 a la fabricación de paneles de control, que son los dispositivos eléctricos que administran la corriente generada, regulan las comunicaciones y se encargan de gestionar el correcto funcionamiento de las diferentes partes del aerogenerador. En los últimos años, la planta ha fabricado todos los paneles a nivel mundial para el modelo V52 y otros del modelo V90-2MW destinados principalmente al mercado europeo. La planta cuenta en la actualidad con 96 empleados.
La fábrica de Daimiel (Ciudad Real) dedicada a la fabricación de palas para el modelo V90 entró en operación en Julio 2008. A día de hoy la planta cuenta con más de 500 empleados. El ajuste de la capacidad productiva de esta fábrica que se inicia hoy afectará aproximadamente a un 30% de la plantilla de trabajadores.
Debido al plan de reorganización mundial, la fábrica de góndolas y bujes de Villadangos del Páramo (León) en estos momentos no puede garantizar con toda seguridad la renovación de todos los contratos temporales. En la actualidad la planta cuenta con una plantilla de alrededor de 550 empleados, de los cuales menos de un nueve por ciento son trabajadores temporales.
La planta de Viveiro dedicada a la fabricación de generadores para la plataforma 2MW y 3MW cuenta actualmente con una carga de trabajo estable, por lo que en estos momentos no se esperan ajustes en sus niveles de producción.