Federico López y Valeria Zaytseva, fundadores de la start-up Taller de Innovación Abierta y creadores de Smartaxi, son dos expertos en Big Data que querían crear algo innovador. Un día, necesitaban un taxi, mucha gente estaba buscando uno y no lo encontraban. Por fin, apareció uno y se montaron, pero se sorprendieron cuando el taxista se quejaba por la falta de trabajo.
“En ese momento nos dimos cuenta de que algo pasaba, no podía ser que el taxista se quejara cuando había tantas personas buscando un taxi”, explica Federico, CEO de Smartaxi.
“Cogimos papel y boli, fuimos a una parada de taxis y, tras tomar datos a mano durante una semana, pudimos predecir cuantos taxis harían falta”. Con esos datos, crearon un prototipo inicial para comenzar el desarrollo de la aplicación y se dieron cuenta de que su idea podía convertirse en realidad.
“Al principio cometimos muchos errores, pero hemos ido mejorando paso a paso” explica Federico, cuyo proyecto ya está en proceso de internacionalización.
Smartaxi, un paso más hacia las Smart Cities
Smartaxi, el proyecto estrella de la start-up Taller de Innovación Abierta, se llevó a cabo sin ninguna experiencia previa, ya que sus fundadores no habían realizado hasta entonces ninguna otra aplicación para dispositivos móviles.
El funcionamiento de la aplicación se basa en la recogida de datos en tiempo real sobre la ubicación del taxi, destino de los pasajeros y trayectos realizados sin encontrar clientes. Con estos resultados, la aplicación analiza los datos y predice en qué lugares es más probable que los taxistas consigan nuevas carreras. “Se trata de un equilibrio entre la oferta y la demanda; en qué parte de la ciudad hacen falta más taxis y qué zonas resultan más favorables para cada taxista en función de su ubicación. Buscamos ampliar el concepto de ‘Smart Mobility’ al gremio de los taxistas” argumenta el fundador.
Y eso es así porque la aplicación funciona gracias a un mapa de calor a través del cual los taxistas pueden ver aquellos lugares donde hay más demanda de sus servicios en tiempo real.
Ahorro y eficiencia
De este modo, los taxistas trabajan más, ahorran en combustible, contribuyendo al cuidado del medio ambiente y descongestionan el tráfico de las ciudades, mejorando la movilidad urbana, dando un paso más hacia el concepto de Smart Cities. Además, los usuarios reciben un servicio más eficiente al ver reducido el tiempo de espera.
“Tú sabes que cada quince días más o menos hay un partido y empiezas a analizar datos en un histórico. Te das cuenta de que cuando hay un montón de gente que llega en taxi al Bernabéu, a las dos horas hay muchos taxis que salen. Esta lógica se extrapola a las demás situaciones” explica Federico.
Los taxistas que, como Marco, quieran unirse a la red de Smartaxi, tan sólo deben seguir cuatro sencillos pasos: descargar la aplicación en su móvil o tablet y solicitar su código de usuario e introducirlo en su dispositivo; después solo será necesario que mantengan la aplicación encendida mientras trabajan e ir marcando los servicios que realizan. Finalmente, y para lograr predicciones más precisas, será necesario que compartan dicha información.
Financiación, el talón de Aquiles
Uno de los puntos más complicados en la creación de un proyecto es encontrar la forma de financiarse pero “hay muchas ayudas que te aportan algo más de capital para conseguir financiación”, según explica Federico. “Sin el apoyo que hemos recibido, tanto de la Comisión Europea como de otras instituciones públicas nacionales y de la Comunidad Valenciana, nos hubiera resultado imposible sacar adelante nuestro proyecto”. Contaron con el apoyo de la Comisión Europea a través de los fondos del Séptimo Programa Marco, así como con el de aceleradoras e instituciones entre las que destacan Wayra, ENISA, Principia Tech, IVACE, el ICEX, la UPV o Plug and Play, con quienes pasaron cinco meses aprendiendo de los mejores en Silicon Valley.
Para Federico, su esfuerzo ha tenido recompensa; Smartaxi es un sueño hecho realidad y su app se ha convertido en la primera aplicación social para taxistas capaz de predecir dónde se encuentran los clientes.