La crisis económica, el ahorro energético, la necesidad de limpiar los montes y la precariedad del empleo, son sin duda algunos de los condicionantes que mueven a los ayuntamientos a plantearse la creación de plantas de biomasa en su comarca.
El pleno del Ayuntamiento de Vinaròs ha aprobado solicitar a la mancomunitat de la Taula del Sénia que estudie si es viable instalar en el territorio una planta de biomasa, una infraestructura generadora de energía, tanto de electricidad como de calor, mediante residuos forestales y que, además, reduce el riesgo de incendios en los bosques.
El punto, presentado por Esquerra mediante moción, salió adelante con el voto favorable de todos los grupos excepto del PP, que se abstuvo. El edil Lluís Batalla, argumentó que considera que se trata de una opción de futuro que debería estudiarse. “La zona de los pueblos que conforman la mancomunitat, por la extensión y los parques naturales que tiene, además de la producción de las industrias del mueble y los residuos que se generan, puede ser un lugar adecuado”, explicó.
El edil reconoció que este tipo de plantas “tienen el inconveniente de que deben estar lo más cercanas posible a los lugares donde se generan la mayor parte de residuos”, lo que podría alejarla de Vinaròs. Pero apuntó mayores ventajas, sobre todo, en cuanto a la creación de empleos, asegurando que pueden generarse cien por cada 7,5 hectáreas de zona boscosa.
Por su parte, el alcalde, Juan Bautista Juan, explicó que en el municipio ya se había presentado una Declaración de Interés Comunitario sobre la posible ubicación de una planta de biomasa y consideró que el edil de Esquerra se interesó en este tema en cuanto se enteró. El primer edil justificó la abstención de su grupo municipal argumentando que los populares consideran que la propuesta se ha presentado en Vinaròs y no en la mancomunitat, por lo que debería ser este municipio el que decidiera si se quiere o no este tipo de instalación.